
En tiempos de preocupación ambiental, el cultivo de alimentos en casa se presenta como una oportunidad valiosa para abordar los desafíos del cambio climático y el consumo responsable. En el mes de julio, diversas opciones de cultivo nos permiten contribuir al cuidado del planeta y al mismo tiempo disfrutar de ingredientes frescos y saludables.
Algunos beneficios ambientales del cultivo en casa:
- Ayuda a disminuir el dióxido de carbono: al cultivar alimentos en casa, reducimos la dependencia de la industria agroalimentaria, que a menudo implica largos viajes y huellas de carbono significativas. Al evitar la necesidad de transporte, podemos contribuir a una menor emisión de gases de efecto invernadero, disminuyendo así nuestro impacto en el cambio climático.
- Desarrolla conciencia por el respeto a la naturaleza y el medio ambiente: al conectar directamente con el proceso de cultivo y ver crecer los alimentos, se crea una mayor conciencia sobre la importancia de la naturaleza y la necesidad de protegerla. Este vínculo con la tierra nos recuerda el valor de los recursos naturales y nos inspira a adoptar prácticas más sostenibles en otras áreas de nuestras vidas.
- Fomenta el autoconsumo: Al cosechar los alimentos en su punto óptimo de madurez, resulta en productos más frescos, nutritivos y sabrosos. Además, al consumir lo que se cultiva, se reduce la cantidad de envases y embalajes utilizados, disminuyendo la generación de residuos y el impacto ambiental asociado.
Cultivos recomendados para julio
En este mes, la tierra está lista para recibir una variedad de alimentos y especias que se desarrollarán de manera espectacular en tu propio espacio verde. Entre las opciones ideales para sembrar en julio se encuentran verduras como acelga, apio, arvejas, brócoli, coliflor, espinaca, lechuga, puerro; y especias como albahaca, ciboulette, menta, orégano, perejil, romero, tomillo.
Cultivar alimentos en casa es una valiosa contribución hacia un futuro más sostenible y es una manera de promover prácticas respetuosas con el entorno. Cada paso puede marcar una gran diferencia en la lucha contra el cambio climático y la preservación de nuestro hogar común.